Una sencilla receta que nos puede solucionar una cena, un almuerzo, un desayuno, un bufé, un brunch... Se trata de un rulo hecho de carne picada de cerdo con huevo y queso emmental. Se le añaden unos frutos secos y se envuelve en tiras de bacon. Se hornea y se puede consumir tanto en frío como en caliente.
Ingredientes:
- 500 gramos de carne picada de cerdo
- 200 gramos de queso emmental rallado
- 1 huevo
- 2 envases de lonchas de bacon ahumado
- 50 gramos de pasas sin semillas
- 100 gramos de pistachos pelados
- Sal y pimienta
Preparación:
En un bol que nos permita amasar los ingredientes echamos la carne picada, el huevo y salpimentamos. Amasamos un poco con la mano y añadimos el queso rallado. Seguimos amasando y añadimos los frutos secos y las pasas. Seguiremos amasando hasta que consigamos una masa homogénea. Es muy parecido a la masa de las albóndigas, pero sin pan rallado.
Disponemos unas láminas de papel film o vegetal sobre la superficie de trabajo y disponemos las lonchas de bacon superpuestas de la forma que se ve en las fotografías. En cada extremo ponemos un par de lonchas de bacon que envolverán los extremos de la carne.
Disponemos la carne en forma de rulo sobre el bacon y terminamos de darle forma para ajustar al bacon. Comenzamos envolviendo con las lonchas de ambos extremos. Vamos superponiendo una locha de cada lado empezando por donde terminamos de disponer las lonchas. Procuramos que queden tensas y bien ajustadas a la carne. La misma grasa del bacon hará que queden bien adheridas.
El film nos puede servir para envolver el rulo y ayudarnos a pasarlo a una bandeja de hornear.
Con el horno precanlentado a 180ºC con solera abajo, lo introducimos y dejamos unos 45 minutos. Le daremos la vuelta a la mitad del tiempo de cocción. Os podéis ayudar con unas espumaderas.
Me gusta cubrir la parte superior con papel de aluminio para evitar que las lonchas de bacon se separen al principio de la cocción. Una vez que se cocinan ya no se despegan.
Pasado este tiempo si el bacon está poco tostado podemos ponemos la solera arriba y hornear unos 5-7 minutos hasta que adquiera ese color dorado tan apetecible. La parte inferior no se verá en el plato, pero si queremos la podemos dorar también.
La preparación soltará mucho jugo de la carne y el queso, que se quemará en la bandeja del horno. Es normal. Luego retiraremos con una espátula los restos de este mejunje que queden en el rulo.
Dejamos templar y pasamos a la bandeja donde vayamos a servir, bien en una sola pieza o presentamos cortadas en rodajas al gusto.
A mí me encantan cortadas finas y sobre una rebanada de pan tostado con mantequilla.
El corte queda muy bonito. No pongo fotos del corte porque éste me lo llevo para cenar en casa de la amiga que más me cuida y me consiente: la Guapa. Te quiero Mar, ésta va por tí.
